sábado, 24 de julio de 2010

otros que te vieron I


Alta va la luna. Bajo corre el viento. Mis largas miradas, exploran el cielo.
Luna sobre el agua. Luna bajo el viento. Mis cortas miradas, exploran el suelo.
Las voces de dos niñas venían. Sin esfuerzo, de la luna del agua, me fui a la del cielo.
Un brazo de la noche entra por mi ventana. Un gran brazo moreno con pulseras de agua.
Sobre un cristal azul jugaba al río mi alma. Los instantes heridos por el reloj... pasaban.
Asomo la cabeza por mi ventana, y veo cómo quiere cortarla la cuchilla del viento.
En esta guillotina invisible, yo he puesto la cabeza sin ojos de todos mis deseos.
Y un olor de limón llenó el instante inmenso, mientras se convertía en flor de gasa el viento.
Al estanque se le ha muerto hoy una niña de agua. Está fuera del estanque, sobre el suelo amortajada. De la cabeza a sus muslos un pez la cruza, llamándola. El viento le dice "niña", mas no puede despertarla. El estanque tiene suelta su cabellera de algas…

Federico García Lorca

4 comentarios:

Blonda dijo...

Cuando llegué a leer el autor sólo dije : " con razón "...

Increíblemente lindo.

UN placer visitarte, besitos

Alejh Boclaud dijo...

serán palabras eternas por describir el silencio?
me tomé un vino con Federico la noche que lo leí.
Hacelo. Vas a ver que se aparece...

otro beso para vos

Maria dijo...

Ajo de agónica plata la luna menguante,pone cabelleras amarillas a las amarillas torres.
La noche llama temblando al cristal de los balcones, perseguida por los mil perros que no la conocen, y un olor de vino y ámbar viene de los corredores..
FEDERICO, tambien. Dedicado a Margarita Manso, su amada.

Tal vez andaba algun mago esa noche, merodeando por los bosques..

Alejh Boclaud dijo...

mágico realmente! hermoso María! gracias por compartirlo!
beso grande